Para 1930 el conductismo se encontraba bien asentado como punto de vista dominante en la psicología experimental, Watson había triunfado y los psicólogos llamaban “conductismo” a ese punto de vista.
El problema principal que tratarían de solucionar en las décadas siguientes sería el del aprendizaje. En si el aprendizaje era el proceso por el cual animales y humanos se adaptaban al entorno, por él que eran educados y podían ser moldeados por motivos terapéuticos o de control social.
Por lo que la edad de oro de la teoría de la psicología entre 1930 y 1950 fuese las teorías de oro del aprendizaje más que de la percepción, el pensamiento, la dinámica de grupos o cualquier otra cosa.
Pero en los treinta los psicólogos tomaron un pensamiento para hacer ciencia: el positivismo lógico.
La psicología y la ciencia de la ciencia
El comportamentalismo reflejaba la idea de ciencia elaborada por el positivismo contemporáneo y sus objetivos de estudios eran la descripción, la predicción y el control de la conducta, pero el positivismo había cambiado.
Ese positivismo cambio y también sus seguidores, ya que dieron el modo de admitir dentro de la ciencia términos que parecían referirse a entidades no observables sin abandonar por ellos el propósito fundamental del positivismo de erradicar la metafísica del discurso humano o por lo menos del discurso científico.
El nuevo positivismo se denomino “Positivismo lógico” por que este unía el compromiso empirista del positivismo con el aparato lógico de la moderna lógica formal.
La ciencia en el medio más poderosos para comprender la realidad y general conocimiento, por lo que positivistas lógicos su propósito se convirtió en proporcionar una receta o formula para hacer ciencia.
El positivismo lógico tenía numerosas características pero dos de ellas resultaron especialmente importantes: la axiomatización formal de las teorías y la definición operacional de los términos teóricos.
Usaban los “términos operacionales” que se referían a las propiedades observables de la naturaleza, y además decían que la observación constituía la base de la ciencia pero reconocían que los términos teóricos eran elementos necesarios del vocabulario científico puesto que añadían explicaciones a las descripciones de los fenómenos naturales.
Según lo concepción positivista de las teorías estas explicaban porque podían predecir.
El positivismo lógico formalizó las ideas del positivismo inicial de Comte y Mach, la observación proporcionaba verdades incuestionables, los axiomas teóricos eran resúmenes complejos de las interacciones de diversas variables teóricas, cada una de las cuales, a su ve, se definía completamente en términos observables.
S. S. Stevens, el psicólogo que llevo las definiciones operacionales a la psicología, lo llamó “la ciencia de la ciencia”, el punto de vista que por fin parecía hacer de la psicología una ciencia natural incuestionable.
Y llega el operacionalismo, este sostenía que los términos que no pudiesen definirse operacionalmente carecían de sentido científico y que los términos científicos podían obtener definiciones operacionales en las que todo el mundo estuviera de acuerdo. Esto significaba que los términos teóricos no podían referirse a entidades mentales sino solo a clases de conductismo. Al final de los años treinta esto se convirtió en un dogma arraigado en la psicología.
El conductismo propósito de Edward Chance Tolman
En sí el problema del conductismo era dar cuenta de los fenómenos mentales sin invocar a la mente. El conductismo pretendía erradicar la mente de la psicología, la psicología era describir la experiencia y la conducta como frutos de las operaciones mecánicas del sistema nervioso.
La teoría de la conciencia afirmaba que los contenidos conscientes no eran sino sensaciones de movimientos corporales, que informaba de la conducta pero sin ser causa de ella.
Tolman tomo decidió tomar lo de: la medida objetiva de la conducta, y no la introspección, era el verdadero método de la psicología.
Y el neorrealismo le proporciono a Tolman la base de su enfoque del problema de la mente tal como lo desarrollo tras aceptar un puesto en la Universidad de California en Berkeley en 1918. Tradicionalmente, las pruebas empleadas para demostrar la experiencia de la mente eran de dos tipos: el hecho de darse cuenta de la propia conciencia a través de la introspección y la aparente inteligencia y el propositividad de la conducta.
Pero el neorrealismo suponía que la introspección no existía y que tampoco existían objetos mentales que observar. Tolman relaciono ese análisis con la teoría motora de la conciencia, donde sostuvo que la introspección de estados internos como las emociones era solo la “acción retroactiva” de la conducta sobre la conciencia. Así que Tolman propuso era un conductismo metodológico que aceptaba la existencia de la conciencia pero que excluía su estudio del ámbito de la ciencia. Además sostenía que el propósito es un aspecto objetivo de la conducta que un observador percibe directamente, no es una inferencia a partir de la conducta observaba, y proponía un conductismo que eliminaba la mente y la conciencia de a psicología pero que conservaría el propósito y la cognición, no como poderes de una mente misteriosa inferida de la conducta, sino como aspectos objetivos y observables de la conducta mismo. Era molar más que molecular.
Escribió que la conciencia proporciona representaciones que guían la conducta y el conductismo, nos dice, se le reconoce un lugar a algo mental entre las causas de la conducta. Las conductas son detectores de la desconocida fisiología subyacente.
Tolman reformulo su conductismo con el lenguaje del positivismo lógico.
La conducta tenía que ser considerada como una variable dependiente causada por variables independientes ambientales e internas pero no mentales. Los conductistas introducen variables intervinientes que conectan las variables independientes y las dependientes dando lugar a ecuaciones que permiten predecir la conducta a partir de los valores de las variables independientes.
El conductismo molar define las variables independientes de forma macroscópica, en términos de propósitos y cogniciones definidos como características de la conducta, pero con el tiempo el conductismo molecular será capaz de explicar las variables molares independientes en términos neurológicos y glandulares detallados.
Tolman redefinió su conductismo como conductismo operacional.
Y en este hay dos principios básicos: primero, afirma que el objetivo último de la psicología es exclusivamente la predicción y el control de la conducta y el segundo, este objetivo debe alcanzarse mediante un análisis funcional de la conducta en el que los conceptos psicológicos se entiendan como variables objetivamente definidas, y es definidas de manera totalmente operacional.
Tolman prefería concebir a los organismo más bien como maquinas complejas capaces de distintos ajustes, de moso que cuando un determinado ajuste esta en vigor, un estimulo dado suscitaría una única respuesta, mientras que con un ajuste interno distinto el mismo estimulo dado suscitaría una única respuesta, mientras que con un ajuste interno distinto el mismo estimulo dado suscitaría otra respuesta diferente. Los ajustes internos estarían causados más bien por estímulos externos, bien por cambios automáticos dentro del organismo.
El conductismo mecanicista de Clark Leonard Hull
Hull también afirmo que el pensamiento, el razonamiento, y otras facultades cognitivas, incluido el aprendizaje, deberían entenderse como procesos de carácter mecánico que se podían describir y comprender mediante la elegante precisión de las matemáticas.
Y él dejo su marca en la psicología con su teoría y sus investigaciones acerca del aprendizaje.
Tenía la idea de que el pensamiento era un proceso mecánico que podía simularse con una máquina real.
Hull realizó un programa que tenía dos componentes principales: la primera explica que una consecuencia directa de la tendencia mecanicista de la psicología moderna. El aprendizaje y el pensamiento no se conciben aquí necesariamente más como función del protoplasma viviente que la locomoción serial y el segundo que la psicología es una ausencia ciencia natural por que trata de descubrir leyes que puedan expresar cuantitativamente mediante un numero reducido de ecuaciones corrientes de las que puedan deducirse conductas de individuos y de grupos como consecuencia.
Pero este concepto de las máquinas psíquicas fueron perdiendo importancia en Hull y él cayó bajo la influencia del positivismo lógico.
La ciencia que el afirmaba consistía en un conjunto de postulados formulados explícitamente a partir de los cuales, mediante la lógica más rigurosa, se deducirían predicciones sobre conductas reales.
Afirmo que la psicología en sus principios básicos, aún es en alto grado esclava de la Edad Media.
Tolman frente a Hull
Ambos conductismos se vieron enfrentados, Tolman creyó que el propósito siempre creyó que el propósito y la cognición eran reales, aunque su concepción de la realidad que tenían cambio con el tiempo y Hull pretendió explicar el propósito y la cognición como resultado de procesos mecánicos no mentales que se podían describir mediante ecuaciones lógicas matemáticas.
Tolman intentaba demostrar que el propósito y la cognición eran reales y Hull respondían remendando la teoría o intentando mostrar los fallos de Tolman.
Pero Hull tuvo mayor impacto sobre la psicología.